Pan de obispo (Bischofsbrot)

40′
8 personas
dificultad

INGREDIENTES

  • 200 gr de chocolate amargo
  • 5 huevos
  • 250 gr de azúcar
  • 1 pizca de sal
  • 20 gr almendras molidas
  • 250 gr de harina
  • 1 cucharadita de levadura royal
  • 75 gr de pasas
  • 50 gr de limón escarchado
  • aceite y pan rallado para engrasar el molde
  • para cubrir
  • 100 gr chocolate amargo
  • 1 cuchara sopera de aceite de girasol
  • azúcar glas para espolvorear

PREPARACIÓN
Picamos el chocolate grueso.
Batimos los huevos con el azúcar hasta obtener una crema espesa, añadimos el chocolate y las almendras molidas.
Enharinamos las pasas para que no se queden en el fondo.
Mezclamos la harina con la levadura, tamizamos y añadimos a lo anterior junto con las pasas enharinadas y el limón escarchado.
Engrasamos y forramos con pan rallado un molde rectangular, llenamos con la masa y horneamos en el horno precalentado a 175º ó 200º durante 60 minutos, dejamos enfriar sobre una rejilla.
Fundimos el chocolate al baño maría junto con el aceite y cubrimos la tarta una vez fría. Antes de servir cuando la cobertura se haya solidificado, espolvoreamos con azúcar glas.

El pan de obispo sabe mejor el día siguiente de haberlo elaborado, porque entonces desarrolla todo su aroma.

Olas del Danubio (Donauwellen)

90′
6 personas
dificultad


Las olas del Danubio también llamado cake de blanca nieve, es una torta rellena de cerezas que mezcla claridad con oscuridad en forma de ondas de distintos colores producidas por las capas de crema, bizcocho blanco, bizcocho de chocolate y cerezas aplastadas que al cortar la tarta aparecen como turbulencias.
La tarta se prepara en una bandeja de horno de laterales altos, para una tarta más pequeña utilizamos un molde rectangular de bordes altos, con la mitad de los ingredientes.

INGREDIENTES

  • 2 frascos de cerezas ácidas (Schattenmorellen de venta en Lidl)
  • 250 gr de mantequilla blanda
  • 200 gr de azúcar
  • 1 cucharadita de azúcar de vainilla
  • 1 pizca de sal
  • 5 huevos
  • 375 gr de harina
  • 3 cucharaditas rasas de levadura royal
  • 20 gr de cacao en polvo sin azúcar
  • 1 cuchara sopera de leche
  • para la crema (pudding casero)
  • 1/2 litro de leche
  • 1 vaina de vainilla
  • 100 gr de azúcar glas
  • 4 yemas de huevo
  • 250 gr de mantequilla blanda
  • 30 gr de maizena
  • para la cobertura
  • 200 gr de chocolate amarga
  • 2 cucharas soperas de aceite de girasol

PREPARACIÓN
Sobre un colador dejamos escurrir las cerezas.
Batimos con la ayuda de las varillas eléctricas la mantequilla, añadimos poco a poco el azúcar, el azúcar de vainilla y la sal hasta obtener una masa envolvente, añadimos los huevos uno por uno batiendo cada huevo 1/2 minuto.
Mezclamos la harina con la levadura y las añadimos en dos tandas a la mezcla anterior batiendo entre una y otra.
Forramos una bandeja con papel vegetal y ponemos 2/3 de la masa. Al restante tercio le añadimos el cacao en polvo y 1 cuchara de leche. Cubrimos con esta mezcla la masa anterior.
Secamos las cerezas con papel absorbente y las añadimos a lo anterior, con ayuda de una cuchara las apretamos contra la masa.
Horneamos en el horno precalentado a 180º con calor arriba y abajo en el segundo raíl (contando desde abajo) aproximadamente 40 minutos. Dejamos enfriar sobre una rejilla.

La crema
Abrimos la vaina de vainilla y rascamos las semillas que añadiremos a la leche.
Ponemos a hervimos la leche. Mientras batimos las yemas con el azúcar hasta obtener una crema espesa (aproximadamente 3 minutos). Cuando esté blanquecina añadimos la maizena removiendo.
Cuando la leche rompa a hervir añadimos la crema y sobre el fuego flojo dejamos espesar. Retiramos el cazo para se enfrié, pero no lo guardamos en la nevera (un consejo: si cubrimos la crema con film evitaremos que se forme una piel sobre esta).
Batimos la mantequilla blanda hasta que esté cremosa y la añadimos cuchara por cuchara una vez se haya enfriado la crema (un consejo: la crema tiene que tener la misma temperatura que la mantequilla, de lo contrario se cortará y sera inservible).

Montaje
Cubrimos la tarta que tenemos preparada y que ya se ha enfriado con la crema y guardamos 2 horas en frío.

Fundimos el chocolate con el aceite al baño maría a fuego flojo y cubrimos la tarta. Con ayuda de un tenedor formamos hondas.

Tarta Tatin

30′
4 personas
dificultad


La tarta Tatin es una variante de la tarta de manzana en el que las manzanas han sido caramelizadas en mantequilla y azúcar antes de incorporar la masa. Su particularidad está en su forma de cocinarla que es al revés, es decir, para su elaboración las manzanas  se ponen debajo y la masa encima.
La tradición dice que la tarta Tatin fue creado por accidente en el hotel Tatin en Lamotte Beuvron, Francia en 1889, lugar del que deriva el nombre. Existen varias versiones acerca del origen de la tarta pero la más aceptada menciona que en un despiste de Stéfanie Tatin se cocinaron las manzanas más de la cuenta, y para no desperdiciarlas le pusieron masa encima y la hornearon, y después le dieron la vuelta con cuidado, dando lugar a esta variante tan conocida en la cocina francesa.

Esta tarta no se puede hacer en un molde desmontable (ojo quemazos asegurados) y por descontado el de silicona, ya que primero pasa por el fuego y después por el horno. Yo lo hice en una sartén de mango extraible que me compré con este fin.

INGREDIENTES

  • para la base
  • 200 gr de harina
  • 100 gr de mantequilla
  • 1 huevo
  • 1 pizca de sal
  • 1 pizca de azúcar
  • para el relleno
  • 6 manzanas
  • 100 gr de azúcar
  • 100 gr de mantequilla

PREPARACIÓN
para la base
Mezclamos para la pasta, la harina, la mantequilla, la sal, y el azúcar, trabajamos hasta obtener una masa uniforme. Formamos una bola y guardamos en la nevera  una hora envuelta en film. Después con ayuda del rodillo aplastamos la masa al tamaño de la sartén.

Para el relleno pelamos las manzanas, quitamos el corazón y las manzanas en forma de media luna. Fundimos la mantequilla en una sartén y añadimos el azúcar hasta que esté caramelizado añadimos las manzanas y cubrimos con la pasta ya elaborada.
Horneamos en el horno precalentado a 180º durante 45 minutos.
Retiramos de la sartén y dejamos enfriar.
Antes de servir espolvoreamos con azúcar glas.